Restaurante: Asador Irurena

Estas opiniones son agua pasada ahora lo regenta otras personas y esta de maravilla calidad y servicio muy recomendable ahora

Hemos estado celebrando una comida familiar (13 personas), y hemos terminado realmente disgustados y cabreados. Hemos tenido que esperar una hora y media hasta que nos han servido el primer plato (hemos empezado a comer casi a las 15:45 h). Aunque hemos pedido por favor que nos sacaran algo para picar, nos han dicho que no, que lo sacarían antes de los primeros platos (que terminó siendo casi una hora después)... Hemos conseguido que, al menos, nos trajeran el pan y el vino... Cuando, por fin, han llegado los primeros platos, casi todos estaban fríos. Vuelta a la cocina. Algunos hemos terminado de comer el primer plato veinte minutos antes de que trajeran el primer plato a otros de la mesa. Nueva queja a los camareros. Espera de media hora para los segundos platos (que, esta vez, han llegado casi todos a la vez), aunque alguno, otra vez, frío. Para los postres, nueva espera de casi 20 minutos. Iban llegando sin cucharilla, que teníamos que pedir (parece que no se daban cuenta de la falta de cubiertos, ni de agua ni de vino) nueva espera para los cafés.. Resultado: final de la comida, casi a las 6 de la tarde, y ni un detalle para compensar semejante desastre de comida: nos han cobrado hasta el último café!!! Como salía diciendo algún comensal de otra mesa: asador irurena, donde se come de pena!!!

Estuvimos hace 3 años comiendo y nos encanto el trato, la comida todo en general con los antiguos dueños. Hemos ido el día de la madre a comer habiendo estado días antes preguntando y nos enseñaron el menú diferente al de hoy y la carta y cual ha sido nuestra sorpresa que nos han dicho que hoy sólo había ese menú y no se podía elegir otra cosa. La ensalada templada se supone porque estaba helada, el hojaldre de hongos aún estoy esperando a que me salga uno y la masa se te quedaba pegada al paladar. El segundo ya de deprimente una lubina, que si le quitamos la cabeza y las espinas, podía pesar 20 grs, el entrecot lo podemos poco hecho y lo sacaron como la suela de un zapato. Pedimos para mi hija unas costillas de cordero y las sacaron quemadas y aún me decía le saco otra cosa y más vale porque por las costillas que fueron para atrás nos cobraron 12 euros. La atención del personal un desastre empezando por la mente o dueña del asador, porque más borde no se puede ser, que no se da de cuenta, que vive de los que vamos a comer. Conclusión os aconsejo que no vayáis a comer hasta que no cambien de dueños. Y como comprenderéis a todas mis amistades le voy a decir que no vayan a comer.

Solo comentar que estuve comiendo en el asador de casualidad... Buscando sitios donde poder comer via interent, y me quede impresionado!! Por la calidad de la comida, la presentación de los platos y el buen trato con los que llevan el asador. Hacia tiempo que no disfrutaba tanto, calidad precio inmejorable, el entorno muy acogedor. Gracias por todo, sois unos verdaderos profesionales!!! Menos contando chistes, jijijiji...... Volveremos. Un saludo

Es un sitio muy agradable y tranquilo. Puedes disfrutar de un ambiente familiar sin peligro para los pequeños de la casa. Los platos del menú son variables. Con lo cual hace que haya diversidad de platos para poder elegir. La carne de muy buena calidad, sin mencionar los pescados a la brasa que están espectaculares. El servicio fue muy amable con toda la familia y se preocupaban por las personas mayores y por los niños para que comiesen lo mejor posible, dando opción a los platos. Yo personalmente lo recomiendo, por su servicio, comida y ambiente.