opiniones sobre el Restaurante Asador Real

Comida buena, personal servicial, salones y decoración antiguos, nuestra mesa(sin reserva) en un pasillo de paso continuo, sin tranquilidad, el olor de la ropa y pelo....... Mucho humo por el horno de leña. Recomendable, pero mejorable(una guardaropia donde no entra el olor de humo y comida). Parking gratis 2 horas, centrico pero nascondido(plaza isabel).

Somos clientes de hace algunos años, siempre muy bien, hemos comido asado de lechal y la última vez provamos el cochinillo, ríquisimo, buena cocina, buen trato, la señora muy atenta y agradable, el señor que está en la entrada domina el asado como nadie. Lo recomiendo, cocina de verdad a muy buen precio.

Buenos ingredientes y preparación. Pero, sintiéndolo por el cocinero, no recomiendo ir. Por qué. Porque es canijo y pasan olímpicamente de la comodidad mínima de los clientes y del servicio, lo que hace que en la relación calidad-precio suspenda estrepitosamente.

Muy bien situado. Salones espaciado con mesas grandes y el servicio correcto y atento sin agobiar con conversaciones anexas. Comimos pimientos asados en horno de leña, gambas a la placha y chinillo asado, y su preparación estuvo muy bien, el postre poco elaborado pero agasajado con una copa de cava y un licor que lo mejoró.

La comida buena, el servicio bueno pero demasiado masificado, de todas formas me gustó y salimos contentos.

Estuvimos en Madrid el 27 de diciembre, todo llenísimo y al entrar a los restaurantes solo recibías malos tratos y caras largar. Al entrar al asador real, me recibe la dueña y me dice que en 45 tendríamos una mesa, y solo por su amabilidad decidimos quedarnos. Fue la mejor decisión que pudimos tomar, pedimos cochinillo y entrecot y ambos estaban de leyenda. El cochinillo aún mejor que el comimos dos días después en Segovia en un restaurante muy famoso y muy bueno por cierto. Cuando estén en Madrid, no lo piensen es una excelente opción y vale la pena pagar un poco más pero comer como se come en este lugar.

Para qué ir a Segovia. En el Asador Real, junto a la Plaza de Opera tienen el mejor cordero que he comido, hecho en su horno de leña.

Muy bien, he estado 3 veces, pero la última, habiendo reservado mesa para dos en fumadores y, habiendo una mesa preparada para dos en esa zona, nos dijo que si tenía que ser necesariamente en fumadores. Tuvimos que esperar a que quedara libre otra mesa. Como comento, bien, pero muy mal ese detalle.