Restaurante: Café Peccato Dolce

Excelente relación calidad, precio y servicio humano. Facilidad de acceso y aparcamiento de vehículos.

La cocina está genial. El cocinero lo borda. Pocos menús te darán tanta calidad a ese precio. Además siempre muy variado y con mucho gusto. La carne, por ejemplo, se nota siempre bien selecciónada y de calidad y dan buenas raciones. Nada de comida grasienta. Ensaladas bien hechas, acompañamientos de los platos trabajados. El problema lo tienen en el servicio. No se organizan. Lentísimas. Es habitual ver como los clientes se exasperan. Hay que entender que es un restaurante para los trabajadores de las oficinas que tienen un tiempo limitado para comer y que, a lo mejor, si nos sobra tiempo lo podríamos dedicar a otras cosas. Cuando, por fin, vienen a atendernos entran haciendo "marcha atlética" a la sala dando a entender que van muy atareadas. He cronometrado lo que tardan en traerte el menú llegando a ser esperas de 17 minutos habiendo sólo 3 mesas ocupadas. Llegamos relativamente pronto y vamos viendo como se va llenando el local mientras no te atienden. Y cuando te atienden casi 20 minutos después de llegar te dicen que perdón pero que está muy lleno. En ese tiempo ya habríamos comido prácticamente. Se ve a la legua que el problema no es falta de personal sino organización. Van corriendo como pollo sin cabeza sin lógica alguna. Primero, al cabo de 5 minutos te viene una a pedir la bebida. Pero no te toma nota de la comida porque tiene que ir la otra. Y luego la otra te tarda otros 12 minutos mientras vas oyendo como hablan entre ellas y la del agua le ve diciendo a la otra en la barra que "hay gente esperando" y la otra contesta "ya voy! Ya voy! " pero sigue sin venir. Así todo el rato. Se oye todo. Te traen para aliñar la ensalada si se la pides pero olvidan la sal. Entonces otra vez a conseguir que te atiendan. Así con todo. Es como un episodio del chicote. Y venga para arriba y para abajo siempre correteando que la verdad es bastante agobiante. Son simpatiquísimas y muy agradables de trato esa es la verdad. Pero no están por lo que hay que estar, más servir rápido y menos socializar. El otro restaurante de la zona terramar atiende a mucha más gente por personal y son infinítamente más rápidos en el servicio pero la lástima es que la cocina no está al mismo nivel ya que no es tan refinado y te sirven raciones más tipo abundante/grasientas. Pero si tienes prisa hay que ir al terramar. El restaurante realmente lo salva el cocinero. Además desde que dan la orden a que sale el plato es muy rápido. Vale la pena pero recomiendo ir a primerísima hora si no quieres que un menú rápido se convierta en un suplicio. Y aún y así lo más probable es que tarden un montón en tomarte nota. Me tomo la molestia de escribir esta parrafada porque creo que el restaurante vale la pena y daría pena que estos también vez tuviesen que cerrar. Estos son los terceros o cuartos que hay en el mismo local y es, con diferencia, la mejor comida. Como se largue el cocinero cerrarán también.

Comida excelente, trato muy bueno. El menú es variado y para los que vamos a menudo como yo se agradece que picada semana los platos son diferentes y no se repiten para nada.