opiniones sobre el Restaurante Callizo

Impresionante. Disfrutamos como dos críos tanto de la comida como del sitio, la presentación.. Bueno de todo. Pienso que hay una cosa a tener en cuenta: que si vas a este sitio tienes que comer de todo porque hay mucho contraste de sabores, y puede que no le guste a todo el mundo... Tienes que ir con la mente abierta y el estómago bien vacío. Calidad-precio muy bien, se paga muy a gusto. A nosotros nos encantó, lo recomendamos encantados y desde luego que volveremos.

Una experiencia para recordar, bonita, agradable, delicada y muy elaborada. Me pareció todo muy bien excepto un par de cosas, que pueden llegar a desmerecer un poco toda la puesta en escena y el trabajo del restaurante. -los camareros se pusieron guantes para manipular los alimentos pero cuando llevábamos más de medio menú, el porqué no lo se. -un plato o entrante que el camarero deposita en la boca del comensal, muy curioso y delicado, pero se desmereció porque al camarero le olía la mano a tabaco de haber estado fumando, y no llevaba los guantes. A lo mejor yo al no ser fumador lo detecto y me molesta más que a otras personas. -las explicaciones de los platos no se entendían muy bien, no se si por el ruido ambiente o por el acento de los camareros, teníamos que pedir constantemente que nos repitieran las cosas. En general muy bien, inolvidable y muy aconsejable. Gracias

Un gran menú de temporada, elegimos el menú piedras, una gran puesta en escena y unos platos con una elaboración espléndida, una visita obligada si se visita ainsa.

Uno de los mejores restaurantes por su originalidad, la calidad de su comida y su relación calidad-precio

Muy divertido y una comida impresionante. Piensas que va a se una comida buena..... Y se queda corto

La comida muy buena, el personal malo, no puede ser que tarde casi cuatrro horas en comer un menú degustación, mi estomago no lo resiste, sobre todo cuando entre plato y plato tardan 15 minutos

Ha sido una experiencia genial, muy diferente a cualquier otro restaurante, sin duda volveremos a venir. Muy recomendable si gusta la comida creativa.

Comida y presentación: exquisitez, originalidad, diversión decoración y confor: demasiado corriente su decoración. Falta de confort, en sus terrazas, (calor). Servicio: excelente el que hay, pero escaso. Crea tensión el ritmo trepidante al que están sometidos

Aunque va a hacer casi un año que estuve tengo que decir, que en menos de un mes comí allí dos veces, y es impresionante como sale uno de allí, con sabores y gustos diferentes y la presentación de los platos, yo cada persona que me comenta que va a estar por aquella zona les recomiendo el restaurante, me parece muy curioso y delicioso todo lo que presentan. Este año vuelvo a subir a ver si me dejo caer para deleitarme con esos platos tan ricos.

El lugar es muy bonito pero la comida no nos gustó tanto como las veces anteriores. Recomendable si se visita Ainsa ...

Excelent rapport qualité prix - pleins de creativité et d'inventitivité - des bons vins a des prix tres abordable - une superbe mise en scene- un petit bémol sur les desserts "on aimeráis tant que cela soit aussi bon que beau!! "

La conclusión final es que no vale la pena hacer tantos kilómetros, la comida bien, pero acompañada de las más de cuatro horas para comer, te queda un mal recuerdo. Entramos a las 14,30 de la tarde y salimos a las 18,35 horas. Creo que es mucho tiempo de espera entre platos que hacen valorar mal el restaurante.

Un establecimiento perfecto, acogedor, comida excelente, personal profesional. Lo recomendaremos y volveré.

El diseño general del restaurante y los menús me parece genial. Comimos bien y el menú nos pareció muy original. El servio es acertado y profesional. Pequeños fallos: se le pregunto a una camarera por el nombre de las setas de un plato en dos ocasiones sin conseguir contestación. Un entrecot poco hecho estaba demasiado frio.

Estuve comiendo el pasado sábado junto con unos amigos. No es la primera vez que estaba allí (podemos añadir unas séis u ocho más). La comida como siempre: innovadora, bien presentada y muy correcta. Las instalaciones, sin pretensiones, resultan agradables. El servicio malo, muy malo: tienen un personal de sala que, en términos generales, exhibe un notable grado de falta de profesionalidad y de desconocimiento de su trabajo, unido a una actitud deficiente (¿estarán mal pagados? ), que les llevo a cometer un elevado número de fallos. La capacidad y el interés para resolver la reclamación planteada tuvo luces y sombras: buena voluntad y ganas por parte de los cocineros/propietarios y absolutamente infumable por parte de una de las propietarias. Tampoco es nada barato. Conclusión: consiguieron estropearnos lo que tenia que haber sido un rato de agradable solaz y disfrute de distintos placeres. No volveré más, ni tampoco se lo recomendaré a nadie.

Un buen restaurante. El local en un entorno inmejorable (Ainsa), la comida con una presentación muy elaborada pero en un linea de platos (el menú actual) algo sencilla para lo que se comenta sobre este restaurante. Si pasáis por la zona es una buena opción para comer y el precio es razonable (menú).

Visitamos el restaurante el pasado 13 de agosto, como siempre se lleno, todo con reservas previas. La comida estuvo muy bien (hemos ido varias veces), sólo una pega que ya es como una mala tradición, las infusiones del final tes ó manzanillas te las sirven en una taza con la bolsita dentro, para cuando unas sencillas teteras para que todo sea perfecto, es un sitio muy recomendable.

Se les ha subido el ego. Intentas reservar para un grupo y te dan largas, les das tus datos de contacto para que te confirmen o no y finalmente les tienes que seguir llamando tu para que te digan que no. Amigos de el callizo todo lo que sube también puede bajar.

Este año el menú ha bajado mucho, muchos platos eran repetidos con cambios a peor y los nuevos no me han gustado la combinación de los ingredientes. La jefa de sala muy poco profesional y no sabe tratar a la clientela. No vuelvo a ir

Menu degustacion de 27 o 42 euros, no incluye vinos.
Para evitar disgustos reservar con antelación; preparos para disfrutar de sinfonía de sabores, predomina lo dulce, pero la variedad está presente. Buen gusto en las presentaciones, texturas acertadas, elaboración cuidadosa, sorpresas-imaginación....no estamos hablando de raciones escasas, aunque si puedes con todo, elige el de 42, no te arrepentirás; es casi imposible fallar al elegir las combinaciones que ofrece el menu degustación, relación calidad precio excelente. No perder la oportunidad de disfrutar de este maravilloso restaurante