Fuimos a celebrar un cumpleaños y no estaban muy conformes con ir a un asador siempre solemos ir a franquicias, pero después de comer en el asador de yeles creo que no volveremos más a las franquicias
Hola me gustaría recomendar este restaurante ya que comimos este mediodía y la experiencia a sido muy placentera ya que iba con unos clientes, nos a atendido de maravilla y en un pequeño salón donde me e sentido como en mi casa. Muy recomendable
Sitio muy acogedor con mucha luz y un ambiente muy jovial buena comida y muy abundante con un menú de 30 € que no puedes terminar, muy recomendable pd: te invitan a chupitos ;)
Fuimos en navidades un grupo de amigos que nos reunimos por esas fechas concertamos un menú de celebraciones y estaba todo estupendo, buena calidad y cantidad porque no hay nada mejor que la cantidad sea de calidad. Total que salimos bien comidos y todo regado con vino de la tierra!! Un recital!!! Este año repetimos para despedir el año
Teníamos una reserva, cuando llegamos estaba lleno, nos tardaron en atender bastante y los platos venían con mucho retraso, nos llenamos de pan y agua entre plato y plato, el menú que tenían por festividad dejaba mucho que desear para el precio que tenia por persona, el entrecot de buey no era más que un simple filete de ternera y el cordero se les había acabado, el postre prometia pastelitos variados y helados y solo fue flan con nata y helado. Es para no repetir.
El restaurante tiene una buen carta y una buena cocina, y la gente es muy amable y atenta. Nos reservaron un lugar agradable. Si hay algún pero, tiene que ver con que es un lugar con mucha capacidad y está lleno, (no en vano se come bien, se está bien... ), y donde hay mucha gente hay mucho ruido a cargo de la gente. No sé en otras mesas, la nuestra estaba muy bien situada y permitía cierta intimidad (mesa redonda, en una esquina rodeada de ventanas). Tienen también un reservado para grupos un poco más numerosos.
Me encanta la comida tradicional, buenas gambas, buen plato de embutidos y un pedazo de cochinillo que quita el sentio
El mejor asado de cabrito que he comido, el precio bastante bueno y el sitio muy acogedor. Un lugar recomendable.
Fuimos de paso por esa zona y como no conocíamos nada entramos a la aventura. La verdad que el trato fue estupendo con nosotros y la comida muy buena. Volvería