Restaurante: Epaia

Nos falto la calidad en alguno de los platos aunque el servicio fue excelente. Le falto llegar a la calidad -precio,

Dentro de lo que conlleva un cuatro estrellas como las del hotel abando de Bilbao, el restaurante epaia (perteneciente a la cadena de hoteles aranzazu), se encuentra situado en el mismo edificio (aunque con posibilidad de acceso independiente desde el exterior). Su mesa es magnífica, focalizándose en una cocina tradicional, elegante y de calidad pero con muy pequeños guiños o toques de innovación y valor añadido más contemporáneos. Su mimo, cuidado en el trato hacia el cliente, su calidez y comodidad, hace de este restaurante un lugar digno de mención. Repetiremos sin duda. Una apuesta segura en cuanto a tranquilidad, comodidad, y buena mesa asegurada que, quizá por un precio un poco superior a la media normal (30 € el menú de fin de semana), merezca la pena tener en cuenta para una reunión familiar, comida o cena de trabajo, etc., como referente de una buena relación calidad-precio. En cualquier caso, un restaurante con el que quedar bien en el caso de ser quien invita. Recomiendo pedir volovanes rellenos de hongos y gambas, bacalao a la vizcaína, carrilleras con chamnpiñones y salsa de hongos y su tarta de dulce de leche. Aunque pueda parecer caro, lo merece y por ello considero que cuenta con una excelente relación calidad-precio. En resumen, si tuviera que dar una calificación al restaurante epaia (hotel abando), del 1 al 10, sería la siguiente: calidad-precio: 7,75 comida: 9 cantidad: 7 calidad: 8,75 servicio: 8,5 ambiente: 9,5 lo que podría hacer una calificación de: 8,42

Nos hemos llevado una impresión penosa, primero nos dijeron que no teníamos reserva sin mirar siquiera, los camareros eran unos reventados con mala cara. La comida de lo peor que hemos comido en mucho tiempo. Lo único bueno el vino porque ya viene hecho. No se os ocurra ir si sois de buen comer. Y todo por el módico precio de 80 euros.

Con amigos, en pareja o familia un lugar muy recomendable. Calidad y buen servicio, sin duda para repetir.

En cuanto a la comida y el trato no tenemos queja alguna, el trato fue estupendo y la comida estaba buenísima. Lo único que no me gusto mucho fue el parking porque tenía pocas parcelas y era estrecho pero es algo que ofrecen gratuito con lo cual me puedo quejar. El resultado final fue que nos fuimos muy contentos, para repetir.