Restaurante: Hotel Emilio

Su cocina, realmente buena con platos típicos de la cocina manchega. Digno de mención su arroz con caracoles, del que pudimos disfrutar mi mujer y yo. El hotel, limpio, correcto y con muy buenas instalaciones. Las calidades impecables, y el servicio inmejorable. Lo suficientemente alejado de la ciudad como para poder descansar. Pude conocer personalmente al propietario, d. Emilio, y compartir una amistosa charla durante el desayuno, quizá una de las mejores de las de estos últimos tres años. Una persona, respetuosa, coherente y digna de mi admiración. Para mí, una parada obligada cada vez que estoy cerca de la zona.

La semana pasada celebramos el aniversario de mis padres y la verdad que no tenemos ninguna queja al respecto, ya que el servicio fue inmejorable, la cocina acorde a la reputación del restaurante emilio, y el trato del personal muy atento en cuanto a las habitaciones nos explicaron la diferencia entre ambas y muy amablemente nos las enseñaron para nosotros hacer la elección.

Hola, somos una pareja que realizamos nuestra boda en este lugar, y si dejamos a parte la comida y el servicio de camareros lo demás muy mal. Mala organización por emilio, que tuvo varios fallos en toda la boda, entre ellos no poner micro al ceremoniante, decoración que no era como acordamos, el dj, era un inútil que borro varias canciones y no tenia ni idea. Fallos que no se pueden tolerar, a parte de otros más importantes. No volveremos ni siquiera para un café, pensarlo 2 veces, y además de esto nos subió el cubierto 1 semana antes de la boda. Hay 2 tipos de habitaciones, las tipo cuéntame, y las reformadas por gente inexperta. Ir a comer y nada mas. Calidad precio de las instalaciones malísima.

Pues yo celebré mi boda y fue un gran error. Mucho plato pero sin nada dentro. Mucho camarero pero ninguno ponia nada. El servicio catrastrófico el precio carísimo y al final más de la mitad de los invitados se fueron a un bar de más arriba a por bocadillos. Fue vergonzoso.. Esta es la auténtica verdad del restaurante emilio.

Reacio a probar una cosa que se llama arroz con conejo y caracoles, ¿cómo puede ser eso un manjar de dioses? Pues lo es. Excelente cocina!