Restaurante: Imanol Etxea Vinoteca

Todo muy bien. Solo indicar que cuando llegué mi reserva no constaba, pero me lo solucionaron con mucha amabilidad. El fallo era claramente de ustedes,

Igual es por las criticas buenas que habíamos oido, pero nos lo imaginábamos mejor. Primeramente la casi inexistente separación entre lo que es el bar y el restaurante, quitándole intimidad. Así como el mobiliario que necesita de un cambio, al menos sillas y cubiertos. El cuidado en la presentación de los platos brilla por su ausencia. Mira que habrá sitios en que haya comido parrillada de verduras, pero en ningún sitio tan mala como en éste. Aparte de tener muy poca variedad, ponen muy poca cantidad, muy mala presentación y mal sabor. Las carnes, al menos el entrecot bastante duro y poco jugoso, amén del pan que ni crujiente, ni nada sino más bien duro. La cuenta algo más de 25 € por cabeza por un entrante compartido y un segundo sin postre. Nosotros no volveremos,hay muchos mejores restaurantes vascos en Madrid por suerte.

Si quieres encontrar perdigones en las perdices y un secreto ibérico con una salsa de hongos incomible de lo saturada de reducción de garrafón, ese es tu sitio. Eso sí, las raciones enormes.

Todo muy mal. Al llegar para la cena lo encontramos todo vacío, lo que nos hizo sospechar de que el sitio no iba a ser bueno. El pescado que pedimos se notaba que estaba pasado y no lo pudimos comer. Algunos pidieron carne con setas y se notaba que todo estaba sin cocinar adecuadamente. Se nos quitaron las ganas de pedir postre. Aún así, al llegar la cuenta nos dieron un clavazo de impresión. Si lo que se pretendía era tener un restaurante de cocina vasca en Alcorcón para promocionar un poco nuestra ciudad, se han lucido. No lo recomiendo a nadie.