Restaurante: La Bodeguilla de San Roque

Me encanta este restaurante comida cocinada con mucho cariño y por supuesto no puedo dejar de mencionar ese couland de chocolate de postre para morirse de rico

Fui a comer con mi pareja el sábado. No tuvimos ningún problema con la reserva hecha por Internet. Ocupamos una mesa en el piso de arriba, junto a un ventanal desde el que se veía la iglesia de San roque (para mí, la mejor mesa del local). La atención fue inmejorable. El camarero, muy atento, nos recomendó pedir "solo" 3 platos, con los que acabamos llenos: delicias bodeguilla (deliciosas las croquetas y los buñuelitos; además llevaba pastel de verduras, langostinos rebozados y una ensalada con salsa rosa), tixola de polbo y langostinos (mmmm) y zorza (casera y perfecta). También nos ayudó con el vino (se le notaba que sabía de lo que hablaba): un mencía, no demasiado fuerte pero persistente en paladar. El pan, de pueblo, era delicioso. Por pura gula, no pudimos resistirnos a probar alguno de sus postres caseros: tiramisú de castañas (muy sabroso y ligero) y flan de toffe con nueces (riquísimo). El café, calentito y con espumita, como tiene que ser. Nos quedamos con ganas de comer zamburiñas, pues las sugerencias de la cocina no las tienen los fines de semana. Tendremos que volver, reservando, pues si no va a ser imposible (entraba gente a pedir mesa y les decían que como en una hora, de la cantidad de gente que tenían). Salimos por unos 25 € por persona

De lo mejorcito en la zona. Un lugar excelente para comer o cenar de raciones por un precio más que razonable. Por 20-25 € persona se puede cenar muy bien con tu bebida, postre y café incluido. Para mí el mejor sitio de raciones calidad-precio de Santiago.
Un sólo inconveniente: no reservan mesa con lo cual hay que madrugar un poquito para no quedar en ayunas.

Me encanta este bar/restaurante... no puedo visitar a Santiago sin comer en este sitio.. y no importa si sea para desayunar o comer o cenar.. todo es muy bueno. El pan es algo especial y el jamón y incluso ,se sirven tapas gratuitos con el vino. Merece la pena a viajar desde Australia simplemente para comer en este restaurante, es un tesoro.