Restaurante: La Estrella de Aranjuez

Fuimos a comer a Aranjuez este sábado y escogimos el establecimiento la estrella de Aranjuez, nos pareció que el precio y las opciones del menú no estaban mal. De toda la oferta existente en esa localidad nos "estrellamos" y nunca mejor dicho. Calificar los platos que pedimos estaría sobrado, un potaje que según comentó el camarero estaba recién sacado y al probarlo por decir algo estaba tibio, junto con los garbanzos duros como piedras. Una musaka de berenjena con un sabor rarísimo. Los segundos, una paella con un sabor inexistente, no se había hecho sofrito alguno, las gambas prácticamente descongeladas. Simplemente era un arroz amarillo con muchos tropezones pero nada trabajado. El cordero asado, anunciado como especialidad de la casa, desde luego asado al estilo tradicional para nada, iba acompañado de una salsa especiada que le daba un sabor rarísimo. Todos estos platos además nos los sirvieron totalmente carentes de sal, paella, mousaka, cordero y potaje totalmente sosos. En fin, a mi parecer no tienen personal cualificado en la cocina y desde luego el servicio, aunque amable, sin ser profesionales, no están organizados, los tiempos de espera son terribles. Para nosotros supuso un fraude de comida y desde luego dinero tirado sin haber comido. Este establecimiento se lo recomendaría a chicote a ver si lo sacaba a flote.

Un buen sitio a un buen precio. La comida bastante bien, aunque el servicio, al haber mucha gente, no fue el deseado, pero aún así se merece una buena nota.

Como ya han comentado, el peor restaurante que he visto. La comida estaba malísima, tardamos como 2 horas en comer y encima caro. Mi pareja pidió unos tortelini carbonara y un solomillo a la pimienta. Bueno, los tortelini eran como los de sobre pero con una salsa líquida y grasienta y el solomillo en vez de pimienta le echaron orégano. A mi me trajeron una parrillada bastante mala y un entrecot recién descongelado, duro y pasadisimo con unas patatas fritas blandas y bastante malas. De postre 2 crepes fríos y crudos con un sirope tirado de cualquier manera. Me parece vergonzoso que te cobren 30eurazos por una comida horrible y un servicio aún peor.

Salimos sin rumbo fijo y de pronto aparecimos en Aranjuez. Como ya era la hora de comer, estuvimos mirando y al final optamos por este restaurante, pues mi hijo es vegetariano y tenían unos platos que le parecieron apetecibles. Mientras esperábamos a que nos pusieran una mesa en la terraza, tuve el palpito de marcharnos, pero no aceptaron. El chaval que nos atendió, muy amable al principio. Nos trae la bebida, bueno parte de ella. Faltaba mi sangría. El dice que era muy buena. Pero era vino con agua y azúcar, esta ultima a granel que venia moviendo con la pajita y no se disolvió, después de volver a pedírsela como tres veces. La comida tardo en salir mucho tiempo. Una ensalada para mi (normalita) una parrillada de verduras (requemada y con muy mala presentación), un gazpacho (que era un salmorejo de bote) un revuelto de trigueros (que tampoco era para echar cohetes) y lacón (que venia frio). De nuevo se olvido de traer para aliñar la ensalada y tuve que esperar y reclamarlo al menos otras tres veces. Cuando por fin llega la ensaladera, viene junto con el cordero asado (asado? Eran dos trozos de cordero guisado, una pierna cortada en chuletas con maquina, con unas patatas fritas. Todo con una presentación espantosa en un plato muy viejo) le digo al chico que aun no he comenzado con la ensalada, que no me puede dejar allí el segundo como pretendía hacer encima de una banqueta. Trae los segundos de los demás cuando yo comienzo con mi ensalada aliñada. Cuando termino la simplona ensalada, le pido que me traiga el cordero, le pido que me traiga el cordero, se lo vuelvo a pedir y ya enfadada le digo que se me esta pasando el hambre. (un poco angustiado por si al final me lo comía con guarnición extra). Como me suponía, entre que ya estaba en pleno proceso de digestión y que el cordero estaba recalentado y nada apetecible, di dos pinchadas y lo deje. Finalmente le pedimos los postres. Tres de creps y una tarta de San marcos (para mi nuevamente) casera. Dos de los creps eran pasables (un tanto gomosos en el interior y duros en los bordes) el tercero se encontraba carbonizado en la parte inferior. La tarta, estaba congelada en el centro. Y al abrirla, tenia como una espuma en el centro. Pregunta por el crep que no se comieron lógicamente, le dimos la vuelta para que viera que estaba carbonizado. Pregunta por la tarta y le digo que mire el en que condiciones se encuentra y nos dice que nos invita a un chupito. Declinamos la invitación. Y aun nos preguntaba porque no nos gustó la comida. A todo esto era un menú de 14,90€. Con lo cual pague 59,60 euracos por una porquería de comida que ni para menú de 7€ serviría. Cuando le fui a pagar me dice que si no me había gustado la comida, me invitaba a un café o un chupito que fijación con arreglar todo con alcohol. Le dije que era la primera vez en mi vida que me iba tan descontenta de un sitio. Por cierto al entrar a pagar con la tarjeta, el local era una leonera, llena de servicios por todas las mesas y encima de la barra. Un servicio pésimo, una comida horrible, una presentación (no, no había presentación) y un precio de abuso para la calidad de los alimentos. Mi recomendación: no entréis jamas ahhh, al principio bromeando, le dijimos al chaval que si no traía la comida pronto tendríamos que mandarle a chicote. Dijo que era un hijo p... porque cuando el tenia 12 años, trabajaba en el reina sofía y le mando a uno de sus mejores camareros y le puso una reclamación por no se que parida.... Jajaja, se lo oí contar a varias mesas también. Ya sabes chicote, no vayas que no le gustas... Jajaja bueno, me rio, pero no es de risa que me soplo 60€ por la porquería de comida y servicio. Aunque pueda parecer una pejiguera, soy una persona que no pongo pegas en la comida. Mi mama me enseño que no hay que desperdiciar comida y para mi fue doloroso pagar por tirar a la basura la comida.