Restaurante: La Posada del Hidalgo

Restaurante muy bonito, buena calidad, servicio lento y un poco caro.

Creo que este restaurante es una estafa. Se anuncian como recomendado por la guía Michelín, y sinceramente yo no lo recomendaría a mi peor enemigo.

El servicio es lamentable: tardamos 4 horas en cenar, de 22:00 a 2:00 horas, con esperas de media hora entre plato y plato (pedimos 4 primeros). Eso sí, tuvimos tiempo de sobra para probar sus distintos tipos de pan, y de paso gastarnos una pasta en vino con el que amenizar la espera.

Con respecto a los segundos, yo pedí "escalopines de solomillo rellenos de foie", que no tiene mala pinta así contado, pero que al final, según resumió brillantemente el camarero al servirlos con la expresión "para quien son los escalopes?", eran solo eso, escalopes.

Pues eso, que una cena mediocre, servida de una forma lamentable, y por la "módica" cantidad de 60 € por cabeza.

Ya me han vuelto a ver a mí por allí... Si de verdad quieres tener un restaurante de postín, no basta con tener vinos de 1000 € en la carta, tienes que saber dar de comer y cocinar.

Si vas a Talavera, ve a Casa Viena, La roti, el Esturión, el Anticuario, y muchos otros, y solo si estás cansado de estos locales y te apetece que te claven por leer la carta de vinos carísimos que tienen, a la Posad del Hidalgo.