Excelente restaurante familiar de comida casera riquísima con un trato excelente y precio moderado, sin duda de lo mejor de la zona
Una casa donde siempre estamos... Pues eso. Como en casa. Solemos acudir un grupo de aficionados al motociclismo y nos tratan a cuerpo de rey. Comida casera, muy bien elaborada... Y con alguna sorpresa interesante como el "mojo de bacalao" o la carne rellena. Calidad por encima de los precios. Por 10 y poco euros te sirven un menú excelente, con variedad y servicio muys adecuado, así como limpieza y orden en el local. Nuestra "silvi" nos atendió con la gracia y desparpajo que le caracteriza... Lo cual todavía nos hace estar más "en casa" volveremos, como todas las primaveras, mientras el cuerpo aguante. Un abrazote, "silvi" ;-)
He ido con mi familia a comer, la comida casera buenisima, ha sido espectacular sin nombrar la amabilidad de silvia y de toda su familia. Volveremos seguro. Rosa
Nos hemos desplazado desde Salamanca para probar el bacalao y hemos quedado encantados con la comida, el trato, el servico, el restaurante y el precioso pueblo de San martín al pie de la sierra de gata, volveremos.
Dentro del precioso marco del pueblo, el restaurante guarda una relación precio/calidad magnífica. La cocina, si no de estrella michelín, sí es digna de una mención al menos. Su bacalao a la kika inolvidable. Volveremos.
Excelente relación calidad precio, como todos estos sitios con solera que se niegan a esa cocina falsificada y pretenciosa que parece imponerse. Excelentes carnes y caza. Quizá se echa de menos algún plato de setas en temporada.