Restaurante: Mesón el Bodegon

Pésimo el sabor fatal de fresco nada y el precio caro y además te dan el precio del menú con bebida y el IVA incluido y a mi me cobraron el IVA aparte le dije educadamente al camarero que no podía estar bien y me dijo que lo iba a consultar y me trajo otra cobrandome el pan el IVA y la bebida a parte en un menú y bien claro ponía que era IVA incluido y bebida ósea que de un menú de 58euros al final 74. 88€ le dije que sí era una broma y me dijo que si quería otra más cara y por evitar un lío pague y me fuy pero imaginen que disgusto. No volveré y soy de cerca y pieso hacer lo posible para que la gente no vaya. Un saludo

Intoxicación marisco. El pasado sábado 5 de mayo de 2012, entorno a las 22:00, nos sirvieron en barra unas navajas en mal estado que nos ha producido a dos personas una intoxicación. Además tenemos sospechas de que lo sabían, ya que las sirvieron con ajo frito. Menos mal que tras nuestras sospechas, no nos las terminamos, y que todo a quedado en una simple gastroenteritis. En resumen, para no volver.

Menuda pasada, lo mejor para comer en San Vicente. Trato es igual de bueno que la comida, yo en 4 días he ido 3 veces por lo bien que nos han tratado y por lo bien que he comido. El marisco excelente, tiene un acuario donde te saca los mariscos antes de cocinarlos y tu mismo/a los puedes ver. La carne realmente sabrosa. Los postres deliciosos, son caseros están riquísimos y no son una miniatura como en otros sitios. El menú está muy bien suele salir por 12 euros. Mi experiencia es que he salido llena todas las veces. Sinceramente lo recomiendo

Exquisito trato, para gente como yo [reconozco mi gula] y gente que sepa apreciar la comida auténtica. Pero el trato, lo supera, quizás, el amor del cocinero, cuando te presentan en la mesa el "sapito" o los pescados de la zona; que si no son del día y salvajes, no hay pescado. Por no hablar de los marsicos, y las carnes (josé manuel, el dueño, era hijo de ganadero de la zona y sabe elegir las carnes) que muestran la pieza antes de ser cocinada. De los postres, sabores de la montaña cántabra (hacen recordar dulces cumpleaños), prefiero que os encontréis co varias sorpresas. Y de vinos: riojas buenísimos y vega-sicilia (a precio excepcional) entre otros, blancos exquisitos. Todos bien elegidos y controlando el precio. Solo he comido en "el bodegón" nueve veces (hasta hoy), y solo puedo definirlo en cuanto a calidad y precio en dos palabras: cojo-nudo. Espero que no cambien y sigan así por muchos años.