opiniones sobre el Restaurante Pinto Y Maragota

Yo no sé donde han comido ustedes o comen habitualmente ni el nivel de exigencia que tienen en cuanto a gastronomía y la buena mesa. Las dos veces que estuve allí me decepcionó lo suficiente para ir descartando como lugar al que acudir. La última vez esa atmósfera tan agradable, me recibió con un espeso olor a sardina a la plancha. Nada más llegar a casa tuve que pasar la ropa por un "aguita" y hacía mucho tiempo que no me pasaba algo así. De lo que comí, su calidad dejaba bastante que desear. Un preparado para salir del paso que demostraba a poco amor o poco interés por el trabajo. El personal no es tampoco una maravilla. Nada que no encontremos a pocos metros aún cuando la zona no es un referente en restauración. Entre plato y plato transcurre demasiado tiempo sin que el numero de comensales justifique el retraso. Esta crítica debe invitar a mejorar los puntos débiles y potenciar sus fortalezas que seguro, las tienes.

Comida exquisita y muy bien emplatado. Servicio correcto y amable. Lugar acogedor y bonito. Detalle en la invitación a chupitos de licores.

Genial, comida riquísima y atención exquisita. Un 10! Repetiremos sin duda! Además precios de crisis, menú del día a 10 euros con postre, bebida y café!

Suelo comer en este restaurante casi a diario, y con la oferta de locales alrededor os puedo garantizar que los días que falto es sólo por cambiar y probar si algún local ha mejorado hasta llegar al nivel de éste. La comida es estupenda, la limpieza, el trato del personal... Por el precio que se paga dentro de la ciudad de vigo, sobresaliente. Sólo una pequeña pega, hay días en que se tarda un poco, pero son los menos.

El sitio está bastante bien y el servicio es especialmente agradable. Yo lo he fichado como sitio habitual

Fantástica situación, local pequeño y cálido, con decoración sencilla pero de buen gusto. Detrás de la barra del bar se puede vislumbrar a los cocineros afanándose en la elaboración de los platos y eso para mi es sinónimo de cercanía y frescura. Fundamentalmente destacaría la calidad del producto, desde las verduras hasta la carne o el pescado, todo ello presentado con un estilo moderno y atractivo. Las porciones son generosas y la relación calidad precio más que correcta. Por otra parte el servicio de los camareros es discreto y eficaz, haciendo gala de simpatía de todo el personal. Repetiré si vuelvo a la ciudad.

La verdad es que viendo las valoraciones de este restaurante puedo decir que, ni de cerca, ha cumplido mis expectativas. El servicio no ha estado mal, no así el tiempo de espera, sólo había 4 mesas con gente y tardaron en traernos un jamón ibérico más de media hora, y ni siquiera estaba cortado a cuchillo. Los segundos platos estaban frios, mandamos uno a calentar, volvieron a tardar un montón mientras mi pareja esperaba pacientemente a probar su comida cada vez más fría, y al final cuando me lo volvieron a traer seguía frio. Resumiendo, después de dos horas para comer un primero de jamón, un segundo que estaba frío, un postre y un café la factura me pareció excesiva para lo que allí nos ofrecieron. Por otro lado el camarero ha sido atento, es lo único positivo que puedo decir, claro que contando que sólo había cuatro mesas con gente. Bueno, la presentación de los platos era aceptable, pero, tanto mi marido como yo, aprecíamos más una buena comida que su presentación, aunque supongo que la presentación de los mismos era para intentar justificar algo el precio.

Un acierto si estáis buscando un sitio nuevo que os sorprenda. ¡mucho mejor que muchos restaurantes de esos tan conocidos de vigo! Ya he ido en planes diferentes y siempre salí contenta: de carta, de tapeo con amigos y a comer el menú del día. Me llamó la atención las ganas de hacer bien las cosas: el mimo en la elaboración y presentación de los platos, el sabor de todo lo que probé, la buena relación calidad-precio y la simpatía de los camareros.

Impresionante. Ya era hora de encontrar un sitio en Vigo en el que puedas comer una comida sabrosa de verdad, con un toque de innovación, una presentación muy cuidada... Y bien de precio. Los camareros, muy agradables y el local también. Los arroces están estupendos. ¡qué arroz de chocos!

Ya era hora de que en Vigo se pudieran comer arroces buenos y variados. El de vieiras es fantástico y el negro de chocos es sorprendente pero delicioso. Se nota que los productos son de calidad y que los platos están cocinados al momento. Y para rematar, los postres son caseros y todos tentadores, el único problema es decidirse por uno de ellos porque dan ganas de probarlos todos. Es un sitio excelente para comidas de grupos porque la carta es amplia y variada.

Un sitio estupendo para tomar unos vinos. Tienen una oferta bastante amplia de vinos por copas y entre ellos hay algunos de mis favoritos. La segunda vez que fui éramos cuatro amigos y ya nos pedimos una botella de vino y un revuelto de foie que estaba bárbaro. Muy recomendable.

Por fin hay en Vigo un restaurante donde comer buenos arroces!!! Probé el de vieiras y estaba soberbio. Y en otra mesa vi un arroz negro que estoy deseando ir a probar. Y por si esto fuera poco la oferta de postres es fabulosa. El brownie de chocolate era una maravilla y las fresas con espuma de yogur estaban como para repetir.

Un restaurante que no debes perderte si estás a la hora de comer cerca de allí. El menú del día es magnífico, buena comida, buena presentación y unos postres que no los encuentras ni en los mejores restaurantes de Vigo.

Comida muy buena, con productos frescos, cocinada al momento y muy bien presentada. El local es muy agradable pero el servicio es un poco lento, aunque vale la pena esperar. No dejéis de tomar algo de postre, son todos caseros y deliciosos.