Un engaño. Mala calidad, muy caro y mal servido. El pan duro, el vino malo, una plato de albóndigas con tres albóndigas minúsculas. Una vergüenza
Comida típica de refugio de montaña. Cuando regresas de hacer una excursión por la zona, ideal para comer en grupo con amigos. Excelente trato familiar. Precios muy normales. Repetiremos seguro.
Ni se les ocurra ir a comer al restaurante de estana cal baste. (cerdanya) el pan era duro, el agua del grifo, las "mandonguilles amb ceps" no llevaban ceps, solo habas que estaban del todo crudas, el "xai a la brasa" ni de broma estaba hecho a la brasa y además la carne era congelada... El resto al mismo nivel... Nefasto... Una tomadura de pelo al modico precio de 18 €... Añadiendo un servicio malísimo, tuve que levantarme para recoger la carta y resulta que no había nadie en el restaurante, estábamos solos... Un desastre
Molt amables en tot, no portavem prou diner i no es podía pagar amb targeta, ens van donar el seu numero de compte i vam pagar per internet un cop arribats a casa... Molta confiança.. I el dinar bonissim, sobretot el senglar amb patates!!!
Hemos estado este fin de semana para hacer la excursión a prat de cadí, tuvimos algunos problemas en la caminata.. Y llegamos bastante tarde al restaurante.. Pensábamos que no nos darían de comer, pues eran más tarde de las cinco de la tarde, pero no fue así nos atendieron muy bien y comimos un excelente menú completo por 18€. Sin ninguna duda volveremos, el cadí lo vale, el pueblo y su gente también, gracias por vuestras atenciones!
Estuve allí hace un par de semanas, desastroso, servicio malo y lento, viendo la suciedad que se acumulaba sobretodo en los lavabos (asqueroso casi vomito) el comedor y en la barra daba cosa tocar la comida, raciones demasiado escasas sobretodo teniendo en cuenta que nos costo más de 20 € por persona con un vino de la casa que parecía Don Simon, no es simplemente que no recomiende este local, es que no deberían permitirse que tales antros existan, una lastima marcharnos de un pueblo tan bonito con la decepción, cabreo y mal sabor de boca que nos dejo el restaurante.
Servicio lentísimo, nos tuvieron 45 minutos esperando a que se dignaran a ponernos la mesa, 15 minutos esperando entre plato y plato, la calidad deja mucho que desear y el precio no es precisamente barato. Lo peor de todo la falta de limpieza, se le quita a uno el apetito después de haber visto casualmente el estado de la cocina y también las mesas sucias, la barra, los lavabos etc... No se lo recomiendo a nadie