opiniones sobre el Restaurante Miramar

Queríamos volver porque hace unos años teníamos un buen recuerdo. ¡que enorme decepción!. Ensalada murciana pequeña y carísima, un arroz de la casa, el más soso que jamas hayamos comido, parece que estaba hecho el arroz y los tropezones ( sin pelar por cierto) cada uno por su lado y sin nada de sal ni sustancia alguna,. El IVA no está incluido aunque parezca mentira en esos precios tan caros y al final de esa comida pésima te encuentras siete euros más de clavo. Cuando te quejas ( tenía que haberlo hecho antes, es verdad) tampoco te compensan con nada ( postre, rebaja de precio, algún chupito) se limitan a decirte, ya no se puede hacer nada. Desaconsejable totalmente, una estafa

Te clavan con el precio........ Es abusivo y se lo dices y se rien. Fui con unos amigos y una m. de tapa con 4 anchoas 4 boquerones 4 trozos de pimientos y 4 aceitunas 8 eurosson unos ladrones.

Carísimos me sentí estafada!!! El servicio bien, pero calidad precio no están equiparadas. La comida regular

Ha estado todo correcto el precio un poco caro pero si quieres comer bien tienes que pagar, estábamos un poco asustasos después de ver las criticas de otros clientes pero a nosotros nos trataron muy bien

Excuse my ignorance in not writing in spanish. A very disappointing restaurant. I ordered cabrito which the menú translates as lamb chop. It is of course kid (goat). There was nothing to eat on them except sinew and i left them but was charged the full price. I tried to explain the wrong translatión but they did not care. We spend well on lunch 70 to 80 euros but they have missed out since then.

Viendo que para comer bien no se podía andar mirando el precio, encargué un arroz en uno de los restaurantes con más nombre de la zona. El restaurante está en un sitio espléndido, desde sus ventanales se goza de unas vistas preciosas de la playa de la isla, decorado con buen gusto, aire acondicionado, acuario con langostas y bogavantes, … Como entrante pedí una ración de chopitos, nada que alegar, abundante, bien fritos, nada grasientos, perfecta. Luego había optado por el “arroz de la casa”, a 16 euros la ración (que ya está bien). El arroz regular siendo benevolente, algo grasiento, muchos “tropezones”, pero de poca calidad, los calamares que estéticamente no quedan bien para ofrecerlos a la romana, los chopitos más pequeños que no se pueden dar como ración y las gambas como las sorpresas del roscón de reyes, una y escondida, quizá para que el que la encuentre, pague el arroz. Dos detalles muy feos en un restaurante de este precio: no cambiar el cubierto entre plato y plato y, lo que más me disgustó, llevarse la paella (recipiente) tras servirnos, a pesar de que aun quedaba una buena ración para repetir. Hubiese reclamado de haberme dado cuenta cuando la retiraban, pero estaba concentrado buscando la gamba en mi plato y cuando quise darme cuenta ya no estaba y pensé que ya no tenía sentido quejarme. En fin, en conclusión, muy decepcionante.