opiniones sobre el Restaurante Viva Galicia

Servicio normal, aunque había mucho público. Al terminar mucho mejor, se les notaba más relajados. Excelente el pulpo a feira, los calamares a la plancha, el chuletón de buey y muy buena la tarta de queso casera. Variada carta de vinos, ya que al ser restaurante gallego no te meten por los ojos solamente el típico albariño. Me llamó la atención la sugerente selección músical -jazz, bossa nova, crooners, míticas orquestas-, aspecto que en los restaurantes no se suele cuidar, sobre todo en la sobremesa. Les pondría un 8 de 10. La visita fue muy satisfactoria.

Ayer estuvimos cenando mi mujer y yo con otra pareja. En cinco minutos teníamos prácticamente sobre la mesa todas las raciones, lo que te obliga a comer a la carrera para que no se enfríen; mi nécora parecía más bien un cangrejo, el jamón serrano ibérico de lo más normalito, pero de lo más normalito; los cogollos de tudela enormes en proporción a su guarnición; más cachelos que pulpo; las sardinas de lo más normalitas, pero de lo más normalitas. Esperaba más. Eché de menos a don cordero, o al viva Galicia en sus primeros tiempos en el guijo.

Pues yo celebré la comunión de mi hijo y fue todo estupendo. La comida, el servicio y la relación calidad precio. Todo muy bien, nos marchamos muy contentos con todo. La comida estaba riquísima. Los calamares los mejores que he probado. Mejores que los de la plaza mayor. El pulpo de hecho nosotros hemos vuelto a comer allí en más de una ocasión. A demás mi familia se quedo encantada con todo y muchos de ellos pidieron el teléfono para reservar mesa y volver cuando se presente la ocasión. A si que yo encantada con el sitio.

Aunque respeto no entiendo alguno de los comentarios que he visto por aquí. A nosotros nos trataron de maravilla y la cena fue tremenda en todos los aspectos. El caldo gallego aguado? Ja ja ja

Me parece un restaurante normal con buena relación precio-calidad y con buena ubicación dentro de la sierra de Madrid

Estuve el sábado 13 de octubre del 2012 con unos amigos, y me quede sorprendida por que nos pusieron de entrantes unos mejillones al vino albariño, unas croquetas caseras, un plato de lacón a la gallega de segundo, a elegir merluza en salsa de la casa, lubina a la espalda, chuletas de lechal o entrecott a la brasa postre variado de tartas copa de cava café vino cerveza refrescos los que quisimos y copa con baile con animación todo por 20 euros yo no me lo podía creer y el servicio fenomenal la verdad es que es la mejor opción para los sábados por la noche en villalba y te diría que de Madrid con estos precios

Buena comida, buenos pinchos, buena bodega..... Servicio atento y agradable, sitio tranquilo con vistas al sierra de Madrid

La terraza está francamente bien pero la comida deja que desear y no mejoran. He estado recientemente para probar si habían mejorado respecto a 2010 y no. Comí percebes y mal ( duros ¿congelados? ), nécoras pasadas de cocción, pimientos de padrón mal fritos y con la piel muy dura, mejillones al vino buenos y gambas a la plancha estas sí, muy buenas. No puede ser que de 5 platos haya tres malos.

Desgraciadamente no puedo hablar bien de lo que me ocurrió hace unos días cuando me disponía a comer en este restaurante de la sierra madrileña. Al aparcar el coche tienen un auténtico basurero en la entrada en el que pudimos ver hasta ratas. Nos dió tanto asco que evidentemente nos fuimos a comer a otro lugar. Es una pena que se permita esto.

Vamos a muchos restaurantes, y a Galicia vamos mucho a comer, y este restaurante tiene de gallego lo que sus almejas de frescas. Nos pedimos un vino, y nos trajeron otro cuatro euros más caro. Nos pedimos unos mejillones al vino tinto, y nos convencieron de que tenían mejores almejas -claro, el doble de caras- y nos trajeron unas almejas de lo peor. Secas, rancias y pasadas. Nunca había comido almejas tan malas. El caldo gallego estaba aguado y no tenía berza, que es lo típico del caldo de allí -si es que no saben ni dónde está Galicia esta gente. Luego pedimos unas nécoras que costaban 8 euros, y en la cuenta final nos hicieron el lío y nos dijeron que era por pieza y tal y cual. Total, que nos clavaron el doble.

Nos pedimos un besugo a medias, y nos traen dos. Uno se lo hicimos llevar, por supuesto. Era un pescado de lo más normal, e incluso estaba pasado. No le habían sacado el buen sabor que tiene el besugo. Total, un servicio nefasto y una estafa de sitio. Que nadie vaya a comer allí, es una engañifa para los banqueteros de bodas, bautizos y comuniones. Que solo de ver mogollón de mesas y sillas ya piensan que comerán bien.

jamás volveré, nos pedimos unos mejillones al vino y estuvimos casi dos días enfermos.

Yo he estado este fin de semana y la verdad que vengo encantada de todo: sitio, servicio, comida. Espero volver a visitar este lugar cuando me dé otro viajecito a los "madriles". Os lo recomiendo y el entorno como dice mi amigo J.O.Cano qué agustito se está!