Restaurante: Rosario Restaurante

No sé si será el dueño. Al entrar le digo, buenos dias, no tiene la delicadeza de contestarme, le pido un café mediano no tiene ni idea lo que le pido, le voy a pagar y el precio por la zona que es y me parece excesivo le digo que tiene precios del sardinero. Sé que el precio no es el que me cobro, cómo dicen los de santander siempre hay algún tonto que entra por cuatro caminos, y ése soy yo lo único que yo entré por buenavista. Así que seguiré tomando los cafés en casa calvo, donde además de ser amables y educadas el café es más barato.

No he “comido” peor en mi vida. La comida repugnante, el servicio deplorable y el local oscuro, pequeño, con las mesas amontonadas y un olor nauseabundo en el comedor.