Restaurante: Cal Comellas

Local recomanat per un membre de la fira de bolets. Vam tenir una gran desepció: atenció per part del personal nefasta i el mateix amo ens va suggerir que ens anessim a un altre local del poble perquè ells tenien la cuina tancada i això que només demanàvem un entrepà. Tot això va passar el día de la fira de bolets que ni aquest día son capacos d'estar preparats per antendre mes gent. És un local no recomanable ja que no reuneix ni les minimes condicions de bar (taules brutes i no recollides, personal del servei inepta i poca visió del negoci per part del propietari).

Encontramos este sitio por Internet y nos gustó el salón con el detalle de las mesas con mantel y servilletas de tela. Fuimos al sitio después de un largo viaje y nos encontramos comiendo en el bar donde no caben 45 personas tal como indican, ni con las mesas/sillas, mantel y servilletas que se muestran en las fotografías del restaurante. Comimos en un bar de carretera donde ponen mantel de papel y donde solo dan una hoja con el menú. Si solo abren el salón en casos extraordinarios, deberían indicarlo. El trató fue correctíssimo, aunque para la celebración que realizábamos no era sitio.

Llegué a este sitio porque estaba perdida hace 3 años y desde entonces soy cliente habitual. No solo me atendieron con una amabilidad fuera de este mundo, sino que ya puesta me quede a comer y el menú una pasada de bueno, comida casolana de verdad, todo familiar y perfecto para desconectar. Mis mejores ratos del mes los paso allí, comiendo, tomando el cafelito, la copita y charlando con gente buena y sencilla.